domingo, 6 de enero de 2008

Una tarde de sol, dos viejos y el muchacho que corre

Sucedio un Dia antes del 2008. Me encontraba en la calle oribe, a una cuadra de la placita de villa ariza, enfrente del domicilio del señor diputado Ariel Basteiro. Había salido a correr. Era una tarde bonita que ameritaba salir de ¨la cueva¨ (Adjetivo que mi querida madre utiliza para referirse a mi pequeño cuartito de estudio, en el cual hay un largo escritorio, un piano, una silla y estantes que permiten revestir las paredes de libros y cientos de CDS, algunos de ellos Deutsche Grammophon ) Decía entonces, que el día era propicio para salir y sentirme vivo. Además en casa no hay aire acondicionado, por que mi familia invierte su dinero en cosas absurdas como una pérgola de madera en la entrada de casa, para que el jazmín trepe por ella, se sienta mas contento y emane perfumito mas rico (interrumpo mi relato para anunciar un gol. Mis vecinos están gritando desaforadamente ¨gol¨ ) Creo que llegado a este punto, están establecidos los motivos que me indujeron a salir al mundo exterior (pero luego habría de saber nuevas posibles causas de mi decisión) Corría entonces, por Oribe, y miraba los lugares familiares como la canchita de futbol ¨Orsai¨, la casa de Sebastian Di Fabio, luego la de Sebastian Rivoira, y cuando me aproximaba a la escuela de De Filipi, una viejita me dice –te felicito. Le sonreí, mientras intentaba entender el motivo de mi felicitado. Seguí corriendo y al cabo de una cuadra tuve la certeza de que se refería a mi iniciativa por hacer actividad física y ser una persona sana (si esa mujer me viera tomar vino tinto comer gomitas y fumar se apenaría seguro) La historia esta llegando a su fin, y si el lector esta esperando que suceda algo apasionante, va a desilusionarse. Esta es una historia de vida, de un día mas, de una persona de apariencia normal a la que le suceden cosas interesantísimas, pero tan graduadas, que cualquier análisis de ellas en un periodo menor a un mes seria aburrido.

Corría, aunque técnicamente era un trote lento, pero uno se siente mejor creyendo y haciendo creer que corre. Y dos cuadras antes de llegar al punto de retorno un señor con una voz de una amplitud descomunal, pero bastante deteriorada por la edad, encorvado y sin varios dientes, me dice (paréntesis nunca me quedo claro el uso del punto y coma y el guión de dialogo, si alguien tiene la gentileza de explicarme, mis narraciones tendrían un nivel mas elevado) - ¨Eso no sirve para nada, tenes que dejar de morfᨠ. Imaginen en el estado que me dejo ese comentario. ¿Qué responderlere? Además recordemos que la viejita me había felicitado antes por mi iniciativa que ahora estaba siendo cuestionada por este nuevo personaje, justo a final de escena!

No le sonreí. No lo miré. Segui corriendo, pensando si el señor me habría visto gordo, me estaría haciendo un chiste o una agresión y también en que ese hecho era digno de ser escrito aquí.

Llegue a la esquina de oribe y la AV Santa Rosa, donde esta la tienda de productos de limpieza ¨Burbujas¨ y emprendi la vuelta ¨il ritorno?¨ A una cuadra de distancia podía ver el Viejo, mi mayor enemigo de la tarde, que se acercaba hacia mi. En realidad yo me acercaba hacia a el.. ¿Pero como probar que el objeto se mueve y no, por el contrario, que El todo se mueve y el objeto permanece quieto? Quizás los dos nos movimos un poco, pero dejando consideraciones filosóficas o Físicas de lado, que están mas inspiradas en Futurama que en La teoria relativa, corría hacia el viejo. El veía que me aproximaba y planeaba con malicia su segundo ataque. Y ahí estaba yo, conciente de que muy pronto iba a ser receptor de nuevas ofensas, sin saber que decir, sin iniciativa siquiera de planear una respuesta. Y Sucedió: -¨Seguro que mañana te comes un lechón entero¨ - Me dijo.

No soy una persona de gran inteligencia, ni de mucha memoria, pero soy creativo y con un gran poder de relacionar conceptos y hacer analogías. En ese momento me quede mudo, al igual que siempre ante un ataque. Mis alternativas eran pegarle al señor o seguir corriendo. Elegí correr. Fui vencido.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

jajaja

¡que gracioso ese señor!

yo me hubiera reído si me decía algo así

igual nunca salgo a correr porque me aburro..
por ahora sólo la natación hace que mi cuerpo siga moviéndose.

un beso clauu
get better!

r dijo...

Definitivamente te vio gordo.
Tendrias que haberle dicho algo asi como "yo puedo comer lechon porque todavia tengo dientes".
No estas gordo. El señor esta celoso de tu juventud.
La señora seguro que te felicito porque sabe que vas a ser papa. Yo digo que Pablo sea el padrino y que le pongas si es chico Esquilo y si es chica Catalina. Yo prometo regalar la cuna. Que Alejandro se haga cargo de la mamadera y el babero.

Ornella dijo...

ajjaja sobre el final me agarra una risa de esas sinceras y contagiosas.
Eso del claude jr en camino es cierto? Me suena a chiste interno.

Claude dijo...

Ornella: si, es una situacion graciosa y extraña, por que los viejitos siempre me hablan. no se por que, debo tener cara de joven de los 40.
No hay claude jr en camino. el chiste fue tan tan interno que solo Ri lo entendió.

Ri: ¿Tiene algun sentido el absurdo de decir que voy a ser papa?
si tengo un hijo definitivamente pablo y vos serian los candidatos a padrinos, ya que amlo no ama a sus ahijados.

Tamara dijo...

No se que es más gracioso. Si el post, o los comentarios de Rodrigo. Además, coincido plenamente con el, no estás gordo y el cela tu juventud. Y si, la gente es mala, envidiosa y comenta (?)

Y obvio, a mi me pasa que la gente de la tercera edad me dan charla, en la parada de colectivo, en los laboratorios, en todos lados. Nunca me pasó cuando salí a correr. Debe ser porque no salgo a correr. Y así estoy, te digo.

r dijo...

No, no fue un chiste interno, aunque no carece de humor interno. Me agarro un ataque de absurdo, de esos que Paul padece constantemente.