martes, 11 de diciembre de 2007

En Puma 8

En puma 8

Todo sucedió en Puma 8. El la besaba apasionadamente. Perdía noción del tiempo, lugar y de que hacer después.
De golpe (sforzato subito) el pelado que maneja el carrito de vigilancia se acerca hacia ellos y les dice en jerga porteña, con aires de superioridad producto de llevar puesto un uniforme que lo acreditaba a colocarse por encima de ellos: ¿que están haciendo chicos? -¿Ustedes compraron acá?…¿vinieron al cine? Porque no pueden estar acá.. Esto ya cerró. No van a poder salir.
¿El tiempo había transcurrido tan rápido? Nuestros jóvenes protagonistas se sentían abrumados por el absurdo de la situación, por que el vigilante era un pelado, pero no un pelado malo. En verdad era un claro ejemplo del tópico pastoral de la poesía trovadoresca, en donde un vigilante les avisa a los amantes sorprendidos por el alba, que deben marcharse.
Les sonrió, recien al irse, pensando en las pasiones de la adolescencia y juventud, o quien sabe que cosa. Les abrió la reja. Los jóvenes marcharon.

7 comentarios:

r dijo...

Cuando yo sea pelado voy a ser un pelado bueno.

Claude dijo...

Cuando seas pelado vas a ser igual que ahora

Anónimo dijo...

Grrrrr

Alejandro dijo...

¿Pasaron a toro 9?
Me contaron que en gallo 23, el limpiador de autos es re macanudo y te deja estar 20 minutos distrayendo la seguridad, de por si ya distraída de la playa de estacionamiento. Claro que después le tenés que tirar unos mangos (me acaba de deprimir esto último, fué muy anti romántico)

Anónimo dijo...

jaja gallo 23


Claauuu hermoso! te quiero aunque te saques horrorosas notas bajas!
Espero que el jueves mejores un poco el promedio.... (?)
Beso mi cielo =)

Anónimo dijo...

me saque 8.. haber si la gente piensa q soy un mediocre mas

Alejandro dijo...

"Mi cielo"... te tiene en una alta estima. Deberías sacarte notas tan altas. Aunque no creo que deba haber una relación de altura de estima con notas de la universidad. Debe estar apelando a la altura de otra cosa. Mejor me callo.